miércoles, enero 17, 2007

La Matriz Azteca

Resulta que mi compañero, amigo y compadre reportero y Rock Star Pachuqueño Ramiro Hernández, me invitó a escribir una cosa linda para el sitio de su banda de rock que se llama GAS Avión, antes se llamaba Gelatina Elástika.
El caso que como siempre estoy muy orgulloso de lo que escribí, pero el méndigo me la pidió en exclusividad, y como la quiero compartir con todos ustedes estimados lectores, mejor les digo que se vayan para allá, sirve de que escuchen que mi amigo, a pesar de tener cara de nena, canta como hombre.

Pásenle picándole aquí.

lunes, enero 15, 2007

Confesiones alcohólicas

Me dicen mis cinco lectores que hace mucho que en este espacio no cuento nada personal, que sólo la oración de jinete, que fotitos fresas con mensajes rosas por cambio de año, que las últimas confesiones fueron con la titulación pero que nada de aquello con lo que suele decir ah mira ahora sí fue sincero.
Para no continuar en esa línea, hoy estoy decidido a hacer una confesión importante y nunca antes hecha, mis confesiones alcohólicas.
Para empezar no se puede decir que yo sea un borracho en toda la extensión de la palabra, soy eso que llaman un bebedor social y la verdad es que bebo muy poco, hace como dos meses que no experimento si quiera el primer grado de embriaguez, ¿decir tonterias y sentirme lo que se dice borracho?: Fiesta de Brujas de el año antepasado.
Ahora me declaro fan de la cerveza, me gusta la clara la oscura, la ambar toda. Siento preferencia por la XX oscura, es lo que más he bebido últimamente; pero también me gusta la INDIO, la Pacífico y la Sol en michelada, solita sólo que esté mucho muy fría y haga mucho mucho calor.
Además de chelero últimamente y sin afan de verme culturoso me ha gustado el vino tinto, ese sí con una cenita, con queso y jamón, puedo beberme casi la botella viendo una película chida, lo bueno es que me gusta su sabor, que realmente no llega a embriagarme y que lo puedo consumir con comida. Pero sí últimamente me ha gustado el tinto, sin nada solito y al tiempo.
Cosas más fuertes me gusta el tequila, Centenario o Tradicional a veces cuando la ocasión lo amerita Pueblo Viejo, me gusta el tequila con agua mineral, mucho hielo, sal y limón y para darle color y sabor un chorrito de Gatorade o de Squirt, otros refrescos aunque de toronja no pasan a gustarme.
También cuando hay lana le entro al Juanito el Caminador, con la misma receta que el tequila pero sin sal y limón, creo que lo puse en mi perfil pero no me gusta el Brandy, el Ron muy poco lo evito, el Vodka sólo en bebidas preparadas porque a mi nunca me sale bien.
Por acá por este lado del mundo hacen un Ponche de Granada que es muy rico, lo reconozco y lo recomiendo pero a mí no me gusta.
En cuanto a los lugares, depende mucho de la bebida: por ejemplo una chela donde más me gusta tomarmela es en una cantina de Guadalajara que se llama la Escalera de los Molachos está en el centro, no es de la zona roja y los baños huelen bien, atascan de limones y naranjas los miaderos. El vino tinto en mi casa o en casa de el Inge, o en un café de Autlán que se llama Sol, la cerveza Sol me gusta en los Jaripeos de medio día. El tequila en fiestas familiares o de amigos muy cercanos.
Para finalizar las confesiones alcohólicas de su servidor, tengo que decirles que parte de las razones por las que se me está quitando lo borracho es que últimamente las crudas han sido muy crueles, la semana pasada me tomé tres cervezas (en dos reuniones de negocio, trabajo, relaciones públicas pues) ni rastros de embriaguéz, pero amanecí con un dolor de cabeza horrible, con sed que tuve todo el día y lo peor: con una nauseas que me dejaron sin comer hasta la noche.
Me pregunto si fue el cansancio, que tampoco había comido muy bien o que las chelas estaban adulteradas, aunque lo último lo descarto porque no es la primera vez que pasa recientemente, lo peor les digo es que con muy poquito alcohol. Espero que no sea la edad o mejor dicho la buena vida y la poca vergüenza.
En fin, espero que les hayan gustado mis confesiones alcohólicas.

Sin más.
Le seguimos luego.